LOS SUEÑOS Y VISIONES NOCTURNAS
Freud decía que a lo largo de la historia, hubo tres momentos de grandes humillaciones: la afirmación de Galileo que no somos el centro del Universo; el descubrimiento de Darwin que no somos otra cosa que un producto más de la evolución; y su propio descubrimiento: que no controlamos nuestra propia mente.
Las emociones enterradas en el subconsciente suben a la superficie consciente durante los sueños y recordar fragmentos de lo soñado puede ayudar a destapar emociones y recuerdos escondidos.
Freud distingue entre sueños “manifiestos” experimentados a nivel de la superficie y los sueños del “pensamiento latente” no conscientes y que se expresan con un lenguaje de más compleja interpretación. Todos los sueños representan la manifestación de un deseo por parte del soñador y muchas veces son realizaciones disfrazadas de deseos reprimidos o mal digeridos. Hace falta descifrarlos, reinterpretarlos para poder encontrar cierto sentido aunque incluso algunas veces soñamos en clave absurda y surrealista, transportados por la capacidad imaginativa del soñador.
Los sueños son también una buena parte de la actividad de la memoria. Las experiencias acumuladas durante el día, suelen ser el origen de imágenes oníricas durante la noche mientras dormimos. Recuerdos de gentes y lugares, emociones mal archivadas, temores vividos, experiencias traumáticas o placenteras, configuran un buen catálogo para soñar y esta producción está asociada a los recuerdos y por tanto a la memoria del soñador.
Un objeto, una textura, un olor, una sensación percibida son sutiles detalles que pueden dar pie a historias oníricas muy concretas. Almacenamos todo tipo de detalles vividos y elaboramos una historia nueva distorsionando, amplificando y modificando a placer según nuestras intenciones más remotas. El sueño es un divertimento que funciona por asociación de ideas e intenciones. La creatividad onírica puede crear estados de absurdidad que pueden llegar tan lejos como la capacidad imaginativa que el soñador sea capaz de expresar en estado de vigilia.
El sueño no es un producto inútil de nuestra actividad cerebral, es un mensaje importante que nuestro subconsciente nos transmite. No son aleatorios y el soñador puede hallar información significativa para interpretar sus dudas, sus miedos y sus debilidades. Podríamos rehacer nuestra autobiografía reconstruyendo nuestros sueños a lo largo del tiempo.
A lo largo de la historia, los sueños han sido considerados una forma de contacto con la divinidad y una forma de vaticinar el futuro. Soñar es abrir una puerta a la mente y crear universos insólitos, personajes misteriosos y situaciones maravillosas o terroríficas. Los sueños van más allá de la lógica y en esto residen su interés y emoción. Cada sueño se conecta con la propia realidad del soñador aportando conocimientos sobre nosotros mismos. Son la manera que nuestro cerebro procesa los problemas y acciones que encontramos en el día a día y es muy difícil interpretarlos si no se conoce al individuo que sueña.
Este libro, aborda el tema de los sueños mostrando como a principios del siglo XX, una colección de cromos incluidos junto a cada tableta de chocolate, mostraba al consumidor generalmente femenino o infantil, diversos tipos de sueños y los interpretaba bajo un prisma popular y sin florituras. Se trata de cromos impresos en color y de gran atractivo y eficacia visual en su época.
La segunda parte del libro tiene un carácter mucho más personal, donde se ha querido abordar con ironía y humor una interpretación más actual de los sueños y nuestras pesadillas más comunes, acordes con el momento que nos ha tocado vivir. Incluimos también algunos ejemplos de cómo ven el acto de soñar, algunos autores y poetas.
Finalmente encontraremos una pequeña colección de disparates inconexos que podrían ser la expresión escrita de cualquier soñador imaginativo.
El libro no pretende otra cosa que reflexionar sobre lo soñado.
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Interpretaciones de antaño
TERREMOTO
INTERPRETACIÓN
Cambio de fortuna, contrariedades en la familia, disgustos con los hijos si hay víctimas.
Si no las hay, existe una persona ausente que nos quiere y no se atreve a declarar su cariño.
Si tiene lugar de noche, desgracia por accidente. Chismes de mujer; persecución de enemigos que triunfarán.
Si es de día, sufrirá una desgracia la persona que nos quiere.
Rumores de gente mal intencionada que nos roban la fama desacreditándonos.
Si perecieres en la catástrofe, te anunciará una desgracia lejana a tus hijos o a tus parientes.
MUERTOS O APARECIDOS
INTERPRETACIÓN
Hay una persona que te quiere, sin que lo sospeches y no se atreve a declarar su pasión.
Te es desconocido si hay un esqueleto.
Si hay cadáveres le ves todos los días.
Si hablan, significa buenas noticias.
Si gritan, pérdida de bienes; traición de amigos.
Si hablan con dulzura, sigue los consejos de tus padres o parientes más próximos.
Si se percibe el hedor de los cadáveres, te esperan malas noticias, presagiando un peligro que debes evitar sin tardanza.
Si es padre o madre de familia, amenaza algo malo a sus hijos.
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Interpretación actual de los sueños
Soñar con un abogado: se trata de una pesadilla terrible donde un profesional especializado en burlar la ley, desarregla todos los asuntos pendientes.
Soñar algo absurdo: indica que nuestro inconsciente no está de acuerdo con nuestras coherentes opiniones.
Soñar que alguien nos adula: al despertar prepárate para hacer frente a un préstamo con desmesurado interés.
Soñar con un atasco en la autopista: reconocer que no somos nada y que no hay escapatoria. Este sueño obliga a una rectificación contundente de los actos, para proseguir nuestro destino.
Soñar que somos un bonsái: significa que es evidente nuestro complejo de inferioridad y nuestro jefe tiene razón cuando nos desprecia e insulta.
Soñar con un calendario: significa que estamos frente a 365 barbaridades.
Soñar con un mundo mejor: sin comentarios debido a lo estúpido de la visión.
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CÓNCAVO ES EL SILENCIO
Cóncavo
es el silencio
convexa la soledad
transparente es el sueño
opaca la realidad.
El
mundo es hosco y espeso
lleno de sinrazón
camino por mi destino
ignorando la razón.
Sueño
desconocidas ciudades
y paisajes atrevidos
donde sufro realidades
de momentos mal vividos.
Me
siento transparente
en nebulosos entornos
cóncavo de repente
y opaco con los recuerdos.
Ilusiones
y vivencias
sin remedio se amontonan
en ansias mal asumidas
y momentos que retornan.
El
despertar es cruel
realidad sin esperanza
noto el sabor de la hiel
y me invade la añoranza.
Cóncavo
es el silencio
convexa la soledad
transparente es el sueño
opaca la realidad.
Los sueños y visiones nocturnas
Joan Martí Valls
Editor: Bubok Publishing S.L.
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